Por Emily Pearson, posted Friday, April 11, 2014 (10 years ago)
AMAZONAS (BP) -- En la selva amazónica, donde las amenidades modernas son escasas o quizá no existen, aun las necesidades más básicas de la vida pueden presentar un reto. La falta de electricidad, los ingredientes limitados y las limitadas cantidades de combustible hacen que cocinar sea más difícil en estas aisladas áreas rurales.
A pesar de los desafíos, muchos misioneros de IMB siguen el llamado de Dios a trabajar en estos duros ambientes compartiendo el evangelio entre los muchos residentes de la selva que nunca han oído el nombre de Jesús.
Los misioneros que se dirigen a los lugares selváticos en Sudamérica son enviados al campamento de entrenamiento de la selva de IMB, donde son enseñados a atender los nuevos desafíos -- incluyendo a cocinar de nuevas maneras.
Los líderes de entrenamiento Charles y Brittany Shirey, quienes han vivido en la selva del Amazonas cerca de 13 años, les enseñan a los novatos de la selva a cocinar para su familia con solamente unos pocos ingredientes simples.
Algunos ingredientes, como bicarbonato, polvo de hornear y aceite de maní, pueden ser llevados de ciudades cercanas cuando los misioneros viajan de ida y vuelta desde sus áreas asignadas. Pero los límites de peso de los aviones y los pequeños espacios de almacenaje significan que otros artículos deben ser buscados, conseguidos o comprados en las comunidades adentro de la selva.
El pescado es una fuente común de carne, junto con la poca caza y el ocasional caimán (tipo de lagarto) o mono. Las frutas no siempre están accesibles. Read More